El aikidoka, que tiene una discapacidad intelectual, es primer Dan de Aikido.
Ángel Ubaldo Pérez es un inspirador aikidoka con discapacidad intelectual que ha dedicado casi la mitad de su vida al Aikido, un arte marcial japonés moderno que combina técnicas de defensa personal con una filosofía de no violencia, armonía y desarrollo espiritual.
Con diecisiete años, el joven deportista decidió plantar cara al acoso escolar para refugiarse en una disciplina deportiva que le ha proporcionado innumerables satisfacciones y una “legión” de amigos: “Desgraciadamente, sufrí acoso cuando iba a la escuela y lo superé gracias al Aikido y a las maravillosas personas que he conocido practicando este deporte”, explicó, antes de dar una lección de vida al asegurar que “siempre intenté responder de la mejor manera posible al bullyng y seguir adelante con una sonrisa”.

Ejemplo de superación, Ángel Ubaldo es una voz cualificada para reivindicar “que se imparta la práctica de las artes marciales en los centros escolares para que todos sepamos defendernos”.
La importancia del gimasio Arashi y de su entrenador, Miguel Ángel Pérez
El gimnasio Arashi, cuya sede está ubicada en el barrio de Los Giles, y su entrenador, el maestro internacional Miguel Ángel Pérez, han sido figuras esenciales en su adaptación a un deporte que lo ha recibido con los brazos abiertos: “Al principio me costó un poco y me enfrenté a dificultades que fui superando con trabajo, constancia, perseverancia y, especialmente, gracias al apoyo de mis compañeros, dentro y fuera del gimnasio”, subrayó.
Y añadió: “Miguel Ángel es una persona muy importante, un gran maestro que me ha enseñado muchas técnicas y que me ha llevado a viajar a grandes eventos internacionales en Francia, Bélgica y Holanda, donde he forjado muchas amistades”.
Por su fuera poco, el grancanario puede enorgullecerse de ser, actualmente, cinturón negro, primer Dan de Aikido, en noviembre afrontará la prueba para subir de nivel, y de Defensa Personal Policial y cinturón azul de Jiu-Jitsu: “Me gusta escuchar para aprender y mi deseo es seguir creciendo en todos los aspectos y formar, parte durante muchos años más, de la gran familia del gimnasio Arashi”, asegura un auténtico modelo a seguir en todos los sentidos.
