Cofundador, primer presidente y socio número 1 de la entidad de San Miguel de Abona revive la victoria del club en el Torneo DISA Gobierno de Canarias de Primera Categoría.
El CL Chimbesque se proclamó esta temporada Campeón de Canarias 36 años después. En un terrero improvisado en el pabellón de Vecindario, dónde se celebró la primera final a cuatro de la historia de la lucha canario, el equipo de San Miguel de Abona levantó el titulo regional.
En las gradas de aquel recinto, como un aficionado más estaba Miguel Reverón, cofundador, primer presidente y socio número 1 de la entidad sanmiguelera. Una persona ligada al club desde su creación en 1983 y que vivió desde el terrero de San Miguel de Abona el primer título regional cosechado por el Chimbesque ante el Faro de Maspalomas en 1989. 
«Fueron lágrimas de alegría” asegura Reverón en declaraciones recogidas en la página web del CL Chimbesque. “No lo recuerdo muy bien, pero creo que fue Salvador Pérez Soliño quien me acercó el trofeo. Pregunté si podía bajar de la grada para celebrar con los chicos, pero la seguridad no lo permitía”, comentó Miguel Reverón. “Me dio la copa y fue un momento muy emocionante y de muchísima alegría”, volvió a recordar emocionado.
En el año 2022, Miguel Reverón fue reconocido con el Premio Canarias de Lucha Canaria, por su labor de promoción del deporte vernáculo sobre todo dirigido a las categorías bases y a los más jóvenes. El sanmiguelero fue una figura clave para crear una arena fértil sobre la que se construyó el CL Chimbesque: “En los años 70 se empezó a hablar de practicar lucha en el municipio. En 1979 se hizo efectivo con los Escolares y comenzaron a destacar luchadores”.
Desde hace unos años se encuentra alejado de la directiva, de funciones de secretario, como desempeñó en la última etapa de Sito Quintero como presidente. Miguel Reverón aporta ahora su emoción y entusiasmo por la lucha y por el Chimbesque desde la grada. Con una cantera nutrida y con un equipo Sénior que logró un histórico doblete la pasada temporada, Reverón continúa portando con orgullo su carné de socio con el número uno, sabiendo que, el verdadero título y reconocimiento, es un legado formativo, cultural y deportivo. Y esa lucha está ganada.
