Las Palmas podría igualar ante el Mirandés un registro de 2022

Los amarillos no encadenan cinco victorias consecutivas desde la temporada 2021/2022. El equipo ya dirigido por García Pimienta consiguió acabar invicto las últimas 11 jornadas de liga.

La UD Las Palmas busca este lunes ante el CD Mirandés un registro muy poco común en el equipo amarillo: cosechar cinco victorias consecutivas como local. Un registro que en este siglo XXI solo se ha conseguido cuatro veces.

Desde el pasado 27 de septiembre, cuando el Almería asaltó el feudo amarillo, el equipo de Luis García no pierde un partido como local. Entre ese partido y el de este lunes han pasado (y perdido) Albacete, Racing, Eibar y Cádiz.

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Para encontrar la última racha tan positiva en el Estadio de Gran Canaria hay que remontarse a la temporada 21/22. Aquel año fue el del cambio de Pepe Mel por García Pimienta en enero tras perder en Fuenlabrada y donde los amarillos cosecharon un final de liga espectacular, con 11 partidos consecutivos sin derrota y donde se cosecharon 5 victorias seguidas como local (Leganés, Amorebieta, Málaga, Mirandés y Oviedo).

Las otras ocasiones que la UD acumuló, en este siglo, cinco victorias como local fue en la temporada 12/13 con Lobera, en la 11/12 con Juan Manuel Rodríguez y en la 05/06 con Juanito en la 2º División ‘B’. También en la 99/00, con Kresic a los mandos, el conjunto amarillo, aún con el Estadio Insular como localía, acumuló cinco victorias consecutivas como anfitrión.

La UD Las Palmas de Luis García llega al partido de este lunes (17:30 hora canaria) ante el Mirandés con la obligación de ganar para mantener el ritmo a Déportivo de la Coruña y Almería pero sobre todo a un Racing de Santander que es líder destacado de la categoría. Y ya de paso, de conseguir la victoria Luis García igualará unos registros poco comunes en la isla durante este siglo.

Seis victorias seguidas como local no se han visto, al menos desde el año 2000, pero para pensar en ello, la Unión Deportiva debe sobrepasar primero el escollo del Mirandés, que a pesar de llegar como colista, no pondrá las cosas sencillas.